Abarca mundos, pero nunca intentes abarcarme,

almaceno tu palabrería más ruidosa con sólo mirarte.

Walt Whitman.

lunes, 4 de enero de 2010

Something

La primera persona con la que Jake se confesó fue Nellie. Nellie, voy a casarme con Rose. Lo dijo sin asomo de burla, tan serio como no recordaba haberle visto nunca, así que Nellie se limitó a asentir, porque si tres años junto a Jake le habían enseñado algo era que, cuando Jake quería algo, lo conseguía, no de la manera asfixiante e intensa en que Mike consigue todo, sino con la tenacidad y el inquebrantable ánimo que Jake emplea desde que se levanta hasta que se va a dormir.
Desde ese momento y para sorpresa de todo el colegio, Rose Weis, la alumna nueva que había llegado con las mejores recomendaciones, que hablaba un francés perfecto y que valoraba la responsabilidad por encima de todo, se convirtió en el motivo por el que Jake Collins, el gamberro descarado que enamoraba a las chicas con sus sonrisas inocentes, suspiraba abiertamente. A Mike se lo contó al día siguiente, aunque ya lo sabía, claro, nunca había sabido ocultarle cosas.
Hasta ese flechazo todo el mundo estaba seguro de que Jake y Nellie tenían algo. Nellie se partía de risa con esos chismes y Jake fingía ofenderse porque ella ni se lo plantease. Lo cierto es que sí tienen algo, mucho, en realidad. La relación de Jake y Nellie siempre estuvo más allá de la amistad, se adoran, Nellie siempre fue la hermana(a veces pequeña, otras mayor)que nunca tuvo, Jake siempre fue su Jake, pero no tenía nada que ver con lo que todos pensaban. En lo que a ellos cuatro respecta, nunca nada tiene que ver con lo que todos dicen.
Cuando estaban en cuarto, Nellie tenía un amigo, Mike siempre decía es maricón perdido, tío con ese aire condescendiente que usaba cuando estaba molesto por algo y ella le ignoraba, porque entrar en el juego del niñato malcriado, egolatra y asfixiante de Mike es siempre un error, al poco tiempo quedó claro que Ed McClintock no era gay.
-Es un gilipollas salido, va a lo que va.
-¿Y a qué va, Mike?- fingía inocencia Nellie, tratando de hacerle sentir incómodo, pero Mike jamás se sentía incómodo hablando de sexo, Mike era el sexo. No le gustaba como ese capullo oligofrénico miraba a Nellie, como si fuese un pedazo de carne, como él miraba a todas las tías, pero Nellie no es "todas las tías", joder, y nadie, y mucho menos ese estúpido que la había encandilado hablandole de todos esos capullos rusos que escribían basura existencial, debería mirar a Nellie así. Nadie. Nunca.
Nellie es inteligente y guapa, a Mike siempre le ha sorprendido que los tíos no se tiren a sus pies, además ha notado que cada vez que se ríe hay como más luz en la habitación, que el ambiente se vuelve más ligero y todo el mundo parece mucho más guapo, pero es demasiado ingenua para entender a los tíos como Ed. Es demasiado buena. Él siempre ha pensado que Nellie es como una mandarina, tienes que ir más allá de la piel para encontrarla, pero una vez la encuentras, lo inunda todo con su esencia, con su olor entre dulce y ácido, esa extraña combinación que le perturba y juega con su cerebro, que le coloca mucho más que la marihuana. Mucho mejor. A algunas personas puede parecerles ácida, pero Mike sabe que, como las mandarinas, es cuestión de cogerla a tiempo. Lo que no quiere decir que Mike quiera cogerla a ninguna hora, no es eso, tío, es solo que la conoce bien y el hecho de que quiera sacarle las tripas y hacérselas comer al anormal impotente de McClintock no quiere decir que esté celoso, sólo quiere cuidar de su amiga, que necesita desesperadamente dejar de sonreir de esa manera, como si fuera el epicentro del terremoto que le agita por dentro, porque si sigue haciéndolo podrían acercársele más gilipollas como Ed. O como Mike. No es que piense en Nellie de esa forma, definitivamente NO, pero los tíos como él suelen hacerlo y no le gustaría que nadie imaginase como sería que la melena rubia de Nellie te haga cosquillas en la cara mientras juegas con su lengua. Mientras recorres su espalda con tu mano, mientras... Pero eso no quiere decir que a Mike le guste Nellie, claro que no, joder, Nellie es una más, es como Brian y Jake, sólo que, bueno, Nellie es vulnerable, aunque sus puñetazos duelan más que los de Jake y sus suspiros se le claven en algún punto entre el estómago y los pulmones.

4 comentarios:

Favio dijo...

Me suena a que Mike tiene que creésela sino se rompería el equilibrio...
incluso pareciera que Nelly es lo único que ha conocido de amor..


me enganchaste con la historia
:)

Sheena Rogers dijo...

(LLLLLL)

No puedo decir nada más! Los adoro ^^

Dara dijo...

Nellie tenía que ser rubia, ¡pues claro que sí!


pd: me gustan, muchomucho.



(te presto un
miau con caperuza
roja)

Paranoid Girl dijo...

waaaao!! me encanta!! pobre chico creo que un dia de estos deberia afrontar la verdad que mentirse a uno mismo a veces no es bueno!

muy bonita la historia!

me encanta la parte de la mandarina jaja

Feliz 2010