Abarca mundos, pero nunca intentes abarcarme,

almaceno tu palabrería más ruidosa con sólo mirarte.

Walt Whitman.

jueves, 21 de enero de 2010

Let's spend the night together II

Jake había abandonado el tarareo de Love me do para cantarla a voces con la letra de Let's spend the night together, lo que, en principio, a nadie le habría parecido posible. Mike se revolvió inquieto en el suelo, Nellie no era de las que dejaban pasar las cosas como si nada. Cuando Ed-debería comprobar que esa preciosidad tiene quien parta brazos por ella-McClintock llegó un lunes con el brazo escayolado y evitándola, ella supo que habían sido ellos, así que les encerró en el baño y les torturó durante horas de esa manera perversamente inocente que solo las rubias chiquititas con olor a mandarina y camisetas de los Rolling saben, ninguno confesó. La nenaza de Jake estuvo a punto, pero, entre colegas, nobleza obliga. Nellie es la criatura más peligrosa que Mike ha conocido y conoce técnicas que harían estremecerse de culpabilidad al mismo diablo, el diablo también es una nenaza. Si en algún momento tuvo tentaciones de confesar, de que Nellie dejara de pensar que lo habían hecho por sobreprotección o por que eran unos niñatos avocados a la delincuencia y a la brutalidad, pensaba en la cara que pondría si supiese lo que ese gilipollas tenía pensado hacer con ella y se le quitaban las ganas al imaginar su cara de decepción o incluso sus lágrimas, porque Nellie nunca lloraba(y menos delante de ellos), pero suponía que era una de esas situaciones. Mike sólo recuerda flashes de aquel viernes en el que supo lo que era ser capaz de matar. Recuerda estar en uno de los retretes del baño con la puerta cerrada fumando y haber escuchado hablar a ese desgraciado. Recuerda cada palabra que dijo y cada inflexión en su depravado tono de voz. Cuando tuviese a la niña a tono y desnuda, su amigo entraría y haría un reportaje fotográfico completito. Mike oía la sangre correr en sus oídos. Se sintió incapaz de moverse hasta que pasaron unos minutos, para entonces ellos ya se habían marchado. Corrió hasta encontrar a Jake y contarle todo. A partir de ese momento Mike recuerda retazos: a Jake sujetándole para que no fuera en su busca y le destrozara la cabeza, a Brian aconsejando que se lo contaran a Nellie y finalmente acorralarle en el aparcamiento vacío después de haber aguantado ver como besuqueaba a Nellie para despedirse. Recuerda que no lo negó y que al principio hasta parecía reirse. Recuerda el sonido de su brazo al romperse como una liberación. Nadie iba a hacer llorar a Nellie. Nunca.
-¿Y qué hizo para molestar a sus majestades?-enfadada, intrigada, colocada, intento de serenidad: Nellie.
-Dijo que Mick Jagger era un gilipollas.-no es que mentir descaradamente le fuera a dar resultado con ella, pero al menos la distraería un rato.
Después de lo de McClintock estuvo sin hablarles tres semanas de las que Mike solo recuerda a Jake quejándose y tratando de hablar con ella, las disculpas torpes de Brian y su repentina obsesión con los cítricos, él, que jamás comía nada que no tuviese madre y padre. A las tres semanas volvió a hablarles porque aunque seáis unos tarados sois los únicos en el colegio que sabéis pronunciar Disraeli Gears(el nombre de ese LP que acababa de publicar la banda nueva de Clapton y que sonaba tan nuevo, tan a noche haciendo cola para algún concierto de los Who). Sabía que, aunque no se lo contaran, tenían una razón.

3 comentarios:

Álex dijo...

Mmmm... Esos chicos están totalmente tocados de la cabeza xD. Y esa niña me asusta. No quiero saber las cosas que se le pasan por la cabeza, se me ponene los pelos como escarpias xD. Todavía sería mejor cuando fueran a sacar "Wheels Of Fire" al año siguiente. Ese Clapton sí que sabía xD. Y conozco Cumbres Borroscosas, solo leí una muy pequeña adaptación en inglés, pero: Heathcliff era mi personaje favorito.

Sheena Rogers dijo...

W-o-w

Recuperando el ritmo, me mola. Pero por favor, no hagas que empiece a odiar a Nellie por ingenua ;)

Dara dijo...

Mierda, si ya tenía ganas de tomarme una cerveza con Nellie, ahora que sé que huele a mandarina mucho más.

Me gusta, pequeña. Mucho.
(te dejo un pez de colores)